Al finalizar los estudios de esta materia, y suponiendo que el estudiante haya superado la misma, debe estar en condiciones de:

1º.- Identificar y resolver los problemas derivados de los conflictos de aplicación de las diversas fuentes del Derecho del Trabajo

2º.- Manejar con cierta desenvoltura la normativa laboral, los repertorios de legislación, así como los instrumentos de interpretación de las normas.

3º- Diferenciar el contrato de trabajo de otros instrumentos jurídicos que regulan la prestación de trabajo para otro. De este modo, identificando el ámbito del Derecho del Trabajo, se conseguirá profundizar en el conocimiento y comprensión de las distintas ramas del Derecho.

4º.- Realizar un cierto asesoramiento de la gestión de mano de obra de las empresas desde una perspectiva jurídico-laboral (elección de la modalidad contractual adecuada, posibilidades derivadas de la estipulación de un pacto de prueba, medidas dirigidas a superar situaciones empresariales desfavorables tales como modificaciones de condiciones de trabajo, suspensiones o extinciones del contrato, etc.) Ello exige un conocimiento adecuado de la normativa laboral.

5º- Realizar un análisis jurídico de situaciones laborales extractadas de la realidad sociolaboral: capacidad de identificar los intereses en juego, en cada caso, en el ámbito de las relaciones laborales individuales, así como las reglas jurídicas aplicables para la composición de tales intereses.
Para ello el alumno deberá aprender a relacionarse con:

6º- Manejar, aunque sea de forma básica, los instrumentos de gestión laboral actualmente empleados por las empresas, a través de una aproximación a los programas informáticos de gestión de nóminas.

7º- Redactar algunos documentos jurídico-laborales básicos, tales como, contratos, cartas de despido, finiquitos, etc., debiendo estar capacitado, asimismo, para realizar el cálculo de indemnizaciones y liquidaciones por fin de contrato.

8º- Valorar de una forma crítica los objetivos perseguidos por la norma laboral (esto es, identificar el modelo de relaciones laborales existente en nuestro ordenamiento), así como los instrumentos que el legislador ha dotado a la normativa laboral para garantizar su eficacia.

En todo caso, debe tenerse en cuenta que los objetivos fijados resultan excesivamente ambiciosos para una asignatura de primer grado. Por ello ha de quedar claro que la meta no es otra que la de iniciar al alumno en todas esas tareas, ya que la profundización en ellas se podrá conseguir cursando los estudios de segundo y tercer grado.